lunes, 30 de marzo de 2009

Soy moldeable, elástico entre sus manos.
Impregna sus huellas, clavándome su estigma en mi cuerpo invertebrado.
Moldeo al hombre que engendró su verdadera obra.

En estos tiempos no quieren ser princesas,
ni ellos pretenden ser príncipes azules.
Preparados para no arrodillarse,
e incubar lamentaciones y encules.
Me pongo a planchar. No quiero una esclava,
ni un espectro habitando la casa.
Hoy no te haré arrumacos, es día de masturbarse.
¿Si he planchado? No soporto que seas falsa,
ya sé, ya sé que colaboro poco en casa,
no te prometí el paraíso o el edén.
Ya he terminado la colada,
he planchado los zapatos de cristal y mi camisa blanca,
al rey le he dado de comer y le he acostado en su cuna dorada.

Autor: Rafael Luna Gómez.

3 comentarios:

Luis Borrás dijo...

Estimado Rafael:
Encantado de descubrir tu nombre y este lugar para leerte.
Un cordial saludo.

Rafael Luna Gómez dijo...

Gracias por el saludo, se agradece...
Abrazo atronador.

Sara Fedrika dijo...

Eres raro y diferente a los demás escribiendo. Tienes tu propio estilo, eso me gusta.
¿Zapatos de cristal planchados?,¿ves cómo eres raro?

Besos.