domingo, 15 de febrero de 2009

LABIOS

Los que conocen a Manuel Forega, -Manuel o Forega-, saben de su inteligencia en cuanto se presentan a él, o son presentados, o casualmente lo conocen.
Esta vez la inmensa mayoría han dicho (aún que no hayan emitido sonido bucal):
Que listo.
Este acto que ha realizado: “labios” demuestra una interacción entre unos labios de mujer, al que el invita; invita al labio que sea beso.
Demuestra que es maestro y por qué es.
Si se escribe:
Bésame.
Si los besos son recibidos con los labios. Es más fuerte el poema, es más poema.

Ya se lo comenté: “buena idea” tenía que haber sido mía, por Dios que gozada. Con lo que me gustan los besos, ¡he! no nos pongamos estupendos en eso de: depende quien te los dé, el tenía los ojos tapados y para el pudor que pudiera surgir, un biombo negro, tachan, tachan. Comente lo que percibieron mis intuiciones entre el nácar de los presentes: tenía que haber dado números a todos. Pero claro alguno, lo colocabas en situación de besar a un barbudo, ejemplo: Fernando Sarría, y ya no era lo mismo.
Si, si lo hubiera besado, con lengua y todo. Jajaja nos reíamos, claro que espanto besar a un amigo con ese desparpajo, que le vamos hacer si yo lo quiero con toda pasión, no enserio, a pesar de lo que el acto del beso conlleva, de los que conozco solo Guinda, sé, que abriría esa posibilidad a hacer este acto más abierto.
La tela, es que siente Manuel de esos labios, de esos besos y según comento, esperaremos poesía recibida. La leche esta arenga del maestro. Que gozada, que también fue una valentía por su parte, aunque cuando paso alguna abríamos los codos para hacernos sitio hacia el biombo, que gozada, tela, telaa.
Con suerte alguna poeta lo imita. Valor para ellas y caramenlos para todos, ejem, ejem,
No soportaría un mal poema de mis labios; que arenga.
Eso fue poesía en Acción.
Rafa

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